sábado, 14 de abril de 2007

¿KAOS O ORDEN? ♦ Por Lic. José Luis Orrico ♦ 14/04/2007



Por Lic. José Luis Orrico


¿KAOS O ORDEN?


► Que pregunta, cuanto nos hace pensar o reflexionar; muchos ven pasar imágenes por su mente, otros solo se enfurecen, y algunos con vos muy baja, ya empiezan a gritar en silencio.

Orden, orden, orden; eso parece casi un grito dictatorial, y otros azorados gritan fascistas; parece que los argentinos solo podemos pasar de un extremo a otro; existen muchas gradaciones de represión, donde en un extremo esta no hacer nada y en el otro matar.

Entonces, quien dice orden es un cuasi golpista, cuando el orden es el respeto por las leyes, normas y constitución; la represión no es mas que separar y castigar a los que violan las normas.

Como se puede vivir en un país, con un supuesto contrato social, si lo que se busca desde el mismo estado, es volver al estado salvaje, anterior a la creación del mismo; y quienes proponen estos postulados son los supuestos fascistas y golpistas; y quienes postulan no reprimir son los supuestos defensores de la libertad o la democracia.

Los argentinos seguimos confundiendo libertad con libertinaje, seguimos confundiendo protesta con presiones agresivas a los demás ciudadanos; sin dudas el derecho a la protesta es nada mas y nada menos que el derecho a peticionar; y en este sentido tiene un rango importante, pero en modo alguno se puede darle supremacía sobre los derechos de los otros, ya sea por no poder circular libremente, por tener que soportar horas, días, semanas, meses; en la puerta de su casas o negocios; esos reclamos extremistas, donde se sitian ciudades, países, casa de gobiernos, intendencias, negocios y casas de ciudadanos; son muy injustos, y nada tiene que ver con el derecho a peticionar; y también debemos sostener y defender el derecho a la vida como el derecho mas supremo.

La democracia, el estado de derecho; nos brindan muchas variantes de reclamos: administrativos, judiciales, cortes internacionales, paros, huelgas, manifestaciones, actos; muy diferente a la presión ejercida en forma violenta a los restantes ciudadanos y funcionarios; el escrache era un acto de protesta del “Nazismo”.

Violencia otra palabra que se confunde en una nebulosa, si vos decís que es violenta una manifestación, que permite el corte de una ruta durante días, te dicen que es un reclamo pacifico; o sea que la violencia se mide conforme el que la aplica, no al que la recibe; pues parece que no se verifica, violencia en impedir el paso a otra persona, tomar una propiedad publica o privada, no respetar las indicaciones de la policía, y pasan a ser violencia el acto de reacción del otro; por eso para muchos, la represión es la violencia del estado, en lugar de ser “la imposición del orden en el estado”.

Nadie pide que se mate; pero protestar es peticionar o exponer algo que me desagrada; de hay, a sitiar un ciudad, un país, una casa de gobierno, cortar el trafico para torcer la decisión política pasa a ser un acto sedicioso, pues se pretende violar el sistema representativo.

Los mecanismos constitucionales deben funcionar, mucho mas allá de la presión ejercida sobre los ciudadanos, sobre los funcionarios, sobre las propiedades privadas o públicas; parece además que el carácter de pública tiene que ver con que es una propiedad común y que todos somos los dueños, entonces si tomo un banco público, es del estado y por lo tanto es de la turba; no se puede permitir ningún manifestante que no pueda ser identificado, o que tenga capucha, o porte palos o cualquier arma.

La sola manifestación con un palo y/o encapuchado es un acto de violencia; el corte de una ruta, que supere los 30 minutos es un acto violencia; la falta de notificación de la protesta, es un acto de violencia; la toma de cualquier propiedad, por una protesta es violencia; aunque no se rompa nada y no se agreda físicamente a nada ni a nadie; es un acto de violencia.

Empecemos a decir los ciudadanos cuales son los actos de violencia, que los comunicadores sociales, políticos, jueces y fiscales llaman pacíficamente; señores periodistas, señores políticos, señores jueces y fiscales, entiendan que sin justificar ninguna muerte y mucho menos la represión injustificada; estos son actos de violencia ejercida contra la ciudadanía, que “pacíficamente” quieren llevar su vida adelante; y tienen la obligación de llamarlos por su nombre, y actuar en consecuencia, sin permitir no solo entorpecer nuestras vidas, sino la vida institucional del país; existen las instituciones, y mecanismos legales, para la protesta y cuando no estén reglamentados deberán estarlo.

Gracias